En la edición del diario EL PAÍS del domingo 20 de noviembre (¡Dios 30 años ya!), se publicó un artículo titulado así. En él se cuenta la visión de maestros y padres sobre la enseñanza en un Colegio Público de Madrid con niños y niñas de 11 nacionalidades y 30 % de minorías étnicas. Por si no habéis tenido la oportunidad de hacerlo os invito a LEERLO, así os podéis hacer una idea de las dificultades que tienen algunos colegios públicos que acogen a todo tipo de alumnos, pero especialmente, a los que tienen más carencias socioeconómicas, afectivas y necesidades educativas. Me descubro ante la amplitud de miras de padres y madres de la Asociación de ese centro, el CP "Méndez Álvaro". Y de las maestras y maestros que les enseñan y educan.
Claro, que tampoco hay que irse a Madrid para descubrir que los centros públicos necesitan más dinero que la mayoría de los concertados. Por eso la LOE no debe tratar igual a los que no son iguales. De dinero hablamos, porque parece claro de qué lado están los Bienaventurados.
Claro, que tampoco hay que irse a Madrid para descubrir que los centros públicos necesitan más dinero que la mayoría de los concertados. Por eso la LOE no debe tratar igual a los que no son iguales. De dinero hablamos, porque parece claro de qué lado están los Bienaventurados.