El libro triste

Ha llegado a mis manos un libro inusual, de los que ayudan a entender aspectos insondables del ser humano como la tristeza. Su autor, Michael Rosen, pasó por la amarga experiencia de perder a su hijo adolescente. ( "¿Quién se siente triste?. Cualquiera puede estar triste. La tristeza viene y te encuentra. Todos tenemos alguna tristeza. Quizá tú tengas alguna ahora mismo, mientras lees esto" reza en su contraportada).
Decididamente no es políticamente correcto hablar de la tristeza, incluso pudiera ser considerado de pésimo gusto por las gentes bienpensantes. Hay ciertos temas socialmente rechazados con los que, paradógicamente, convivimos a diario y dejamos de lado, como si no existieran. Sin embargo, la tristeza está ahí. Algunas veces nos atrapa y nos envuelve, pero ello no significa sucumbir ante ella. Antes al contrario, hemos de luchar cada día para vivir teniéndola por compañera hasta que el tiempo nos haga más fuerte. Por que, como dice su autor "Me digo a mí mismo que estar triste no es lo mismo que ser una persona horrible. Y que si estoy triste no quiere decir que yo sea malo".

Por eso, leer este libro constituye para los niños un viaje experiemental por los territorios grises de la tristeza. Una oportunidad para conocer, sentir y comprender la tristeza en nuestras vidas y en las de los demás. Una reflexión profunda sobre nuestros sentimientos.
Os invito a leer el libro, a comentarlo con vuestros alumnos o hijos, a sentir la emoción que rezuman sus páginas sin esconder a los niños este lado oscuro (¿o mejor gris?) de los seres humanos.
Maravillosamente ilustrado por Quentin Blake (el preferido de Roal Dahl) está publicado por la editorial Serrés y su precio es de 12,98 euros.